Es asunto va así. Como alguno ya sabrá yo soy un venezolano que vive y trabaja en Italia buscando realizar un sueño: Vender chocolate venezolano en Europa. Pero he tenido mis grandes problemas logísticos para hacerlo. No tengo el capital para abordar tal empresa. De manera que improviso mucho para lograrlo. De todas esas improvisaciones salió el venirme a Italia a invocar las ruedas del destino (que yo en el destino no creo pero es una forma de llamarlo). Todo esto lo digo para decir que YO TRABAJO A LO NEGRO pues soy un clandestino según las leyes europeas y sobre todo las Italianas.
No es una situación agradable ni mucho menos fácil, pero yo me la disfruto porque me imagino a mí mismo como un ciudadano del mundo que lucha atrapado en los limites mentales de gente que aún cree en conceptos como el nacionalismo. Pero esta es harina de otro costal.
El punto es que mí jefe es un Italiano que tiene muchísimas propiedades y se dedica a muchos negocios sin tener registrada una compañía. Hasta ahora se ha desempeñado en el área de los bienes raíces. Compra casas, las remodela y las vende. Para esa actividad no ha abierto ninguna compañía, pues él también anda a lo negro. Evidentemente las pocas personas que trabajamos para él, italianos y no, le trabajamos por horas a lo negro.
Para describirles un poco más el personaje. Es la típica persona que fue muy pobre (o al menos eso hace creer) pero a fuerza de trabajo (y de prestamos de los bancos) logró hacerse con un cierto capital (que según él aún debe a los bancos). Yo con él he establecido una relación que va más allá del jefe-empleado pues siempre me toca viajar mucho con él y he tenido que escucharle y aconsejarle en varios de sus problemas (él conduce su furgón y yo le habló de filosofía por al menos 2 horas cuando toca).
En uno de esos largos viajes me puse a hablarle del bitcoin y le aconseje que comprara algunos cuantos, sobre todo para su hija. Le he recomendado que vea esos bitcoin como una parte importante de la herencia que le puede dejar a ella. Yo sé que el tipo maneja plata y que comprar unos 5 BTC para engavetarlos no le será ningún
problema. Pero nada que lo convencía.
En estos últimos días ha querido re-negociar conmigo lo que me paga (que es bien poco). Yo a él le trabajo pocas horas a la semana de modo que no me molesta trabajarle por poco cuando yo tengo tiempo libre, al final de cuenta más de la mitad del tiempo de trabajo es viajar y hablar. Pero ahora quiere que le trabaje por lo mismo otros trabajos más empeñosos y por más horas y en realidad eso a mí no me interesa. Evidentemente también se niega a pagarme más. Así que le propuse un negocio tanto para quitármelo de encima pues siempre he visto que no le interesa el bitcoin; pero para mi sorpresa terminó aceptándolo.
Le propuse que comprara el equivalente de los BTC de los euros que pretendía pagarme por una temporada y que por dicha temporada independientemente de la fluctuación del BTC/€ él me pagaría mi hora/BTC de forma fija hasta que se le acabaran los BTC que había comprado destinados a pagarme por esa temporada. Y que si él accedía a hacer eso yo podía pensar trabajar más horas para él.Disculpen el ladrillo pero tenía que contárselo a alguien.