Me he encontrado con gente que tenía esta misma opinión de los que creemos en Bitcoin, supongo que algunos tienen la "esperanza" en lo improbable o desconocido, mismo cuando se trata de algo como la web esa.
Bitcoin no es algo "desconocido" en lo que inviertes y cruzas los dedos para que mañana el "dueño de bitcoin" no te robe todo antes de que puedas retirarte, bitcoin es totalmente transparente, su información fundamental está disponible para todos, comprar o no comprar bitcoins (o cualquier otro activo escaso) es una decisión racional y fundamentada en hechos objetivos y comprobables, no compramos bitcoins esperando que tenga un rendimiento de 10% diario ni mucho menos (tragarse un cuento como ese sería bastante idiota), sabemos desde el principio que su valor adquisitivo está sometido al libre descubrimiento de precios en los mercados (como cualquier otro activo en el mundo libre), la
decisión de comprar bitcoins es incomparable a la
idiotez de "invertir" en algo que con 10 segundos de estudio y cuestionamiento te das cuenta que es insostenible y que (más temprano que tarde) el dueño va a desaparecer con toda la pasta.
Tampoco hace falta ser tan duros...
Lo que hay que decir a la gente es que nadie da duros a cuatro pesetas.
¿Cuántos años crees que tiene ese dicho de los duros y las pesetas?, ¿cuántas veces crees que estos idiotas lo han escuchado?, ¿no hace falta ser tan duros?, ¿hay que repetirlo de nuevo con la esperanza de que ésta vez se lo crean?, sólo un grito y una cachetada en el rostro sacaría a un idiota de su delirio.
Pero no les demos tanto crédito excusando sus acciones por haber nacido idiotas, sabemos que la mayoría de los que "invierten" en un ponzi no lo hacen con ingenuidad absoluta, ellos creen que se pueden pasar de listos y "ganarle al sistema", se meten aún sabiendo que al "invertir" en eso están financiando y perpetuando la estafa, intentando pasar la papa caliente a otras personas, incluso muchos participan activamente en la atracción de nuevos "inversores", la inversión en una pirámide normalmente no tiene nada de ingenuidad, tiene toda la malicia, y la estupidez que el idiota puede dar. En ese orden de ideas, se merecen todas las cachetadas, los gritos y los insultos que se pueda darles.