Una propuesta de mejora es el ERC-223, procedimiento por el cual el envío de tokens a un contrato que no los espera resulta en la cancelación de la transacción, evitando de esta manera la situación vigente. No es la única evolución planteada, pero es de las más destacadas.
Por lo visto, el mercado de los Exchange no está aún preparados del todo para soportar las evoluciones del ERC-20 hacia ERC-223. Esta semana, la ICO Coinvest ha tenido que degradar el estándar de su token COIN de ERC-223 a ERC-20. Para ello, ha tenido que crear un hardfork sobre su token a fin de crear COIN V2.
Curiosamente, Coinvest es una ICO que quiere crear una Exchange nuevo en el mercado, introduciendo algunas novedades como los índices referenciados en criptomonedas.
El problema lo han tenido al lanzar su token COIN e intentar colocarlos en los distintos Exchange, la mayoría de los cuales aún no soportan el formato ERC-223. Es otro palo más para esta ICO, dado que apenas llegaron al 15% del hardcap al cual aspiraban.
Lo anterior viene a demostrar que ser de los primeros en implementar las novedades en los protocolos tiene que analizarse muy bien y medir los tempos con esmero.
